El Mirador, casi nuestra segunda casa. Las horas de día y de noche, e incluso de madrugada que hemos pasado. Lugar de reunión desde ni se sabe cuando. Lugar donde tomar una cervecita y ...con los colegas. Donde se llega después de currar a desestresarse, donde por las mañanas se comentan las noches y por las noches las mañanas, donde mirar la mar y el famoso rayo verde de Julito, en días con mucho sol y despejados.
Ese mirador que nos ha visto crecer y que a la mayoría nos vera envejecer.
Propicios dias!!!!!
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